viernes, 19 de julio de 2024

“LOS PÍCAROS DE CONIL Y ZAHARA”, PABLO ANTÓN SOLÉ (26 de 39).

[CONTINUACIÓN del 12 julio 2024]

sigue … «”CAPÍTULO VII. LAS MISIONES PROSIGUEN ANUALMENTE.- LA CURIOSA FIGURA DEL P. PEDRO DE LEÓN.- HECHOS EXTRAORDINARIOS.

Años más tarde, en 1.599 acaeció otro hecho digno de nota. Los P.P. Pedro de León y Pedro de Sanlúcar habían ido a misionar, como acostumbraban, a CONIL y Zahara. El Duque acababa de ganar un pleito contra la Hacienda Real, que sin ningún derecho había puesto y alquilado almadraba en Tarifa. Era preciso tomar posesión de la misma, para lo cual el P. León acompañó al ejecutor del Consejo Real. Estaban los de Tarifa echando las redes en el mar y, al verlos llegar, tomaron las armas dispuestos a defender lo que poseían pacíficamente arrendado al Rey. Tan persuasivas fueron las palabras y razones del P. León, que cedieron enseguida. Se achacó a milagro, obrado por el Santísimo Sacramento, en cuyas vísperas se llevó a cabo esta intervención. Predicó el P. León allí la fiesta por la tarde y otros cuatro sermones en los tres días siguientes, con gran consuelo de todos y muchas confesiones (8). 

[Ambientación] Plano de la isla y de la ciudad de Tarifa levantado en el año 1.770, gentileza de J.A. Patrón. Fuente: <Tarifa, puerto de comercio y de pesca entre los siglos XIV y XVII>, Europa Sur, Antonio Torremocha, 11 marzo 2023. 

El P. Santibáñez nos trae un hecho muy curioso tomado del <Compendio>, del que ya dijimos algo al hablar del pícaro Carriazo de la Ilustre Fregona de Cervantes. No determina el año. Atraído de un extraño apego, se había venido dos veces a las almadrabas, a pesar de haber sido devuelto a casa de sus padres, un hijo de un señor y título de España. Y allí estaba otra vez por la primavera, a pesar de los guardias y castigos impuestos. Y se fue a confesar con uno de los padres y éste no le quiso oir, si primero no se aseguraba que volvería con sus padres. Él entonces se fue para el P. León y le dijo: ¿Qué le va a su compañero en que yo no sea pícaro, que no quiere confesarme?, yo no quiero ser caballero, sino xaveguero. Ya, ya an prouado conmigo mis padres por dos otras veces a tirarme de este exercicio y llevarme a casa, y me buelvo. Si V.R. quiere confesarme, en buenora. Y si no, io no devo más que buscar confesor que me absuelva de m is pecados. Después de discutir y ajustarse lo que era obligación, le oyó convencido el padre. Y dice el P. León, refiriéndose a este caso, que halló una bonísima conciencia debajo de aquella mala ropa y que antes por evitar ocasiones de pecados y ofensas de Dios, que sobran en los palacios de los príncipes, se retiraba este mozo a vida tan encontrada con las obligaciones de su nacimiento (9). 

[Ambientación]  “Los tres mendigos”, de Giacomo Ceruti, Il Pitochetto. Colección Thissen-Bornemisza. Fuente: Museu Nacional D´Art de Catalunya.

Termina el capítulo, de donde hemos tomado el hecho, con las siguientes frases, que rebosan donosura y gracia y que quiero sirvan, a la vez, de epílogo de todo lo anterior, y de buen consejo y moraleja:

Como no es de espantar que entre tanta rotura de vicios y perdición de costumbres sepa la Divina Providencia asegurar o mejorar las de un joven de tan ilustre prosapia: así no es de aconsejar a los que quieren aventureros salvarse, que se recojan a el iermo de las Almadrabas, donde ninguno de estos anacoretas se halla canonizado, siendo ordinariamente el trezno (?) de estas gentes tan sin dios, como sin ley y sin Rey.”»

Notas del autor:

(8) Apéndice 2º, cap. 19.

(9) Apéndice 2º, cap. 19. 

Fuente: “Los pícaros de Conil y Zahara: estudio histórico sobre los jesuitas y las almadrabas del duque de Medina Sidonia en la segunda mitad del siglo XVI”, Pablo Antón Solé; edición original en Cádiz, 1965; reedición Ayuntamiento Conil, 2009. 

[CONTINUARÁ el 26 julio 2024] 

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