[Viene del 7 abril]
La duquesa de Medina Sidonia, replica al Ayuntamiento de Conil, poniendo los puntos sobre las íes, rebatiendo los argumentos de su concejal de Urbanismo, que desprecia el valor histórico de lo derribado por no tener una antigüedad superior a los doscientos años.
El artículo original no va acompañado de ninguna fotografía, por lo que, con cierta osadía, se han encontrado algunas para que sirvan de ambientación. Precisamente, la duquesa describe con algo de más precisión, las que ilustraron su primer artículo, indicando fechas y detalles de las mismas.
Titular del artículo de la Duquesa, escrito en contestación de la respuesta dada por el Ayuntamiento ante su primer artículo. Fuente: “DIARIO DE CÁDIZ”, del viernes 11 de junio de 1982.
He aquí su transcripción:
«El diccionario de la lengua sirve para que tengamos una idea general del objeto que designa el vocablo. Define “castillo” como “lugar fuerte cercado de murallas”. Esa “tapia” que se ha derrumbado es precisamente un paño de la muralla, que enmarcaba el recinto o “espacio comprendido dentro de ciertos límites”. Diré también que los restos de la misma, aún en pie, denotan una antigüedad muy superior a los dos siglos. Esto sin perjuicio de que algunas zonas hubiesen sido reedificada en el curso de los siglos, apareciendo puertas que no estaban en el trazado primitivo, y siendo cerrada la que daba al pueblo, rematada por un cubo, aún en pie, con restos de las escaleras del camino de ronda.
Artículo de Isabel Álvarez de Toledo, a dos columnas, donde insiste en la desastrosa actuación del Ayuntamiento conileño en relación con su intervención en el castillo. Fuente: “DIARIO DE CÁDIZ”, del viernes 11 de junio de 1982.
Los planos publicados con mi artículo proceden del Archivo de [la Casa] Medina Sidonia. El primero, detallado, se inserta en una colección que mandó hacer el duque en el siglo XVIII, de las fortalezas y algunos edificios públicos existentes en sus estados, señalando las zonas ruinosas, como se puede ver en el interior del de Conil. El segundo, que tiene por fin explicar el funcionamiento de la Almadraba de tiro, fechado en 1765, nos muestra la ubicación de la fortaleza en el conjunto de la muralla y como, efectivamente, tenía recinto cerrado. El tercero, de 1727, da idea del alzado de la misma, en el conjunto de la villa, siendo la finalidad del dibujo explicar la forma de la costa.
Plano del castillo de Conil en 1768, donde se detallan las principales dependencias del mismo. Dibujo publicado en el primer artículo sobre este particular. Fuente: “DIARIO DE CÁDIZ”, del viernes 28 de mayo de 1982.
En cuanto a la página manuscrita corresponde a un proyecto de reparos y reformas, de 1757. El alto del castillo-palacio y algunas zonas del bajo se encontraban en ruinas, según explica la descripción detallada, denotando la antigüedad del conjunto, que con algunos cambios data, según ya he probado, de principios sel XIV. ES probable que para ustedes las ideas “castillo” y “almenas” no puedan separarse, y al no verlas sobre la “tapia”, la considerasen vulgar corral. Si en muchas fortalezas han desaparecido por la acción del tiempo, otras no las tuvieron nunca. Tengamos en cuenta que el de Conil no fue alcázar árabe, SINO UNO DE LOS PRIMEROS EDIFICADOS POR LOS CRISTIANOS en plena Reconquista. En todo caso cuando se ataca a un monumento no basta saber generalidades. Hay que estar preparado a distinguir excepciones y particularidades.
Sobre captura de pantalla en Google Maps, con imágenes de 2024, se circunscribe la planta del antiguo castillo, con la desaparición de la mayoría de sus dependencias y muralla. Elaboración propia Rafael Coca.
Dicen que se contaba con permiso de la Delegación de Cultura. Hablé por teléfono con el delegado señor [Luis] Torres Royo, y éste me aseguró ignorar que se estuviese haciendo obra en el castillo de Conil. No es la primera vez que nos encontramos “palabra contra palabra”. A menudo la Delegación, y el propio señor Torres Royo, me han negado haber autorizado barbaridades, que según aseguran, se perpetran a sus espaldas y sin su consentimiento. Sería positivo que el crimen perpetrado contra el patrimonio común, sirviese para aclarar quién miente, de una vez por todas. No puedo negar ni afirmar que haya consultado con el P[adre] Antón Solé. Procedente de la antigua Dirección General de Bellas Artes, este sacerdote continúa ejerciendo un dominio absoluto sobre el patrimonio histórico artístico gaditano, a través de todos los cambios y relevos. Supongo que múltiples títulos académicos justifican sus conocimientos. Pero desgraciadamente éstos no se reflejan en una conservación y restauración adecuadas de los monumentos gaditanos.
Recreación del Conil amurallado de finales del siglo XVII: sus cuatro puertas de acceso, la precisa ubicación del castillo-palacio de los Guzmanes y la iglesia de Santa Catalina; en el extramuros, el Convento de Mínimos, actual parroquia, y la majestuosa Chanca del Duque. Fuente: “elturistatranquil punto com”.
Recuerdo como siendo delegado de Cultura Carmen Pinedo [Sánchez] acudieron ambos a Sanlúcar, para comprobar cómo el interior de la iglesia de Santo Domingo, que es de piedra, estaba siendo recubierto por un antiestético repellado de cemento, “pastiche” que se remataría con las inevitables rayitas pintadas, que han desfigurado definitivamente el magnífico templo renacentista, único por su heterodoxia arquitectónica. Dado que el padre Antón es inamovible, venga quien venga y salga quien salga, y con independencia de su intervención en el asunto de Conil, que sería utilísimo aclarar, sólo me queda pedir a la Virgen del Rocío que le ilumine, y que quede algo de nuestra tradición, para legar a nuestros nietos. Porque la historia muestra cómo UN PUEBLO QUE DESTRUYE SU TRADICIÓN, DESTRUYE AL MISMO TIEMPO SU FUTURO. // Isabel ÁLVAREZ DE TOLEDO.»
“Rehabilitación" de parte del paño de muralla que da a la calle Castillo, 2 marzo 2020, Rafael Coca.
*** Fuente: “DIARIO DE CÁDIZ”, del viernes 11 de junio de 1982.
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